Tipos de Fotografía de Bodas

La fotografía de bodas ha evolucionado mucho en los últimos años, ha pasado de ser una fotografía meramente de “posado” a tener muchas variantes, muchas de ellas artísticas y ha convertirse en un tipo de fotografía en sí misma, incluso ya muchos profesionales se dedican por completo a este tipo de fotografía.

Sin duda, las nuevas tecnologías han influido en esta evolución y lo que antes era un mero “formalismo” ahora se ha convertido en una de los elementos más importantes dentro de una boda.

Hoy en día, la fotografía de boda es un mercado muy competitivo, dónde la oferta de diferentes profesionales, y sus consecuentes diferentes estilos de fotografía es enorme y muy interesante.

Anteriormente, quizás las fotografías de una boda se “quedaban” en el ámbito familiar y muy personal, ahora, con el enorme auge de las redes sociales todo ha cambiado y cada vez más gente muestra su evento en ellas.

En este artículo vamos a tratar de repasar todos los diferentes estilos de fotografía de bodas en auge en los últimos años, podrás ver con qué estilos te sientes más identificado.

  • Fotografía natural.

En este tipo de fotografía existen ciertas fotos estipuladas, eso sí, nadie hoy en día hará un reportaje con “posados” por completo.

Aquí, se busca una mezcla de espontaneidad como también se busca lo bueno de la técnica fotográfica más estructurada.

Algunos buscan en una imagen detalles como una sonrisa, una mirada o una caricia para elaborar la historia a través de las fotos.

  • Fotografía de detalle.

En este tipo de fotografía lo más importante es el detalle, tiene un mayor acercamiento a los objetos pequeños.

A través de esa búsqueda de objetos pequeños, pero con mucho significado, según expertos de este estilo, se trataría de contar la historia a través de la espontaneidad, pero también a través de la delicadeza.

Ser sutil y delicado es primordial a la hora de captar cada sentimiento de cada instante.

  • Fotografía cinematográfica.

En este estilo se trata de utilizar una técnica cinematográfica, se trata de captar los momentos de forma natural y sin posados, pero siempre buscando una perspectiva cinematográfica.

En este estilo se recopilan características como la creatividad, modernidad, dinamismo y diversión.

  • Fotografía artística.

En este tipo de fotografía de boda fundamentalmente se busca la creatividad, la originalidad.

El fotógrafo cuenta el acontecimiento de un modo muy particular.

Se usan diferentes encuadres, ángulos y puntos de vista que no esperarías.

  • Fotografía romántica.

Para mucha gente, lo importante es que las fotos de su boda desprendan ternura y romanticismo.

Para ello, es necesario una buena comunicación y “feeling” entre el fotógrafo y la pareja ya que la actitud de la pareja en este caso le hará ser más intima que en otras situaciones.

En este estilo de fotografía se busca, que al recordar el evento viendo las fotos, se consiga desprender toda la emoción y romanticismo y haga retroceder al pasado.

  • Fotografía documental o periodística.

En este tipo de fotografía, el profesional actúa como un fotoperiodista.

Aquí se trata de retratar todo lo que sucede, naturalmente, el posado pierde importancia en este tipo de fotografía.

Con este estilo, se obtiene un reportaje totalmente único, ya que no existen dos bodas iguales.

Infinidad de profesionales del sector se dedican a este tipo de fotografía, por lo cual entendemos que es muy demandada.

  • Fotografía de moda.

También hay muchos fotógrafos de moda que han decidido rediseñar su carrera profesional y alternarla con el sector “nupcial”.

De ahí que muchos reportajes tengan un cierto sentido editorial propio de revistas de moda.

  • Fotografía paisajística.

En este tipo de fotografía predomina el paisaje ante los novios.

Estos tienen importancia, por supuesto, pero se busca que el marco que rodea a la pareja sea tan espectacular, que haga merecer la pena la importancia que les dan.

Este estilo requiere de gran sensibilidad para buscar el momento exacto y la forma exacta de tomar la foto mezclando el paisaje con la pareja.

  • Fotografía tradicional.

Por supuesto, no debe faltar la fotografía tradicional a la que muchos novios tradicionales acuden, incluyen fotografías posadas con los novios y familiares y como fondo la iglesia con su decoración para la boda.

  • Fotografía en blanco y negro o sepia.

Hay novios que adoran los recursos creativos y gustan de las fotos en blanco y negro o sepia para que estas tengan un aire diferente y tengan un álbum de bodas diferente.

 

Por supuesto, cualquiera de estos estilos requiere no solo trabajo y experiencia en el mismo día del evento, sino también mucho trabajo de postproducción.

 

Sabemos que la sesión fotográfica no tiene porqué quedarse solo en la sesión durante el día del evento, existen sesiones preboda y postboda en los que funcionan los mismos estilos anteriormente mencionados y en los que hay una serie de ventajas entre las que podríamos enumerar:

  • Mayor conexión entre pareja y fotógrafo, sobre todo si se hace con cierta antelación, dará la oportunidad de establecer confianza entre los novios y el fotógrafo, lo que dará lugar a esclarecer bien el estilo a desarrollar para todo el reportaje y que los novios aparezcan y “actúen” con la cámara de una forma más relajada y natural.
  • Además, es un plan diferente, muy útil para evadirse una hora de los “quehaceres” diarios.
  • Puede ser un recuerdo especial, aunque no sean las del propio evento, pero el recuerdo siempre quedará ahí.
  • También podrás analizar el resultado, saber cómo se comporta el fotógrafo y el estilo de la fotografía, si ese estilo se adapta a la pareja.
  • No hay prisas ni nervios del día del evento, donde las parejas pueden tender a pensar en muchos detalles que deben salir bien.

 

Si bien es cierto que normalmente los profesionales no se cierran a un único estilo, por lo que todo puede consensuarse entre la pareja de novios y el profesional que va a realizar el trabajo.

Lo más importante es conocer los estilos más demandados, como hemos hecho en este artículo y tener buena comunicación entre el fotógrafo y la pareja para que el resultado sea el deseado.